León ha registrado en el mes de marzo 1590 parados más en las listas de desempleo, rompiendo la barrera de los 30.000 desempleados, alcanzando los 31.072. Supone un incremento del 5,39% respecto al mes anterior y del 0,27% respecto a marzo de 2019. Se trata de la provincia que más empleo ha destruido en la comunidad, solo por detrás de Valladolid.
Son cifras muy preocupantes, pero a la vez esperadas dada la situación provocada por el efecto del coronavirus, que ha supuesto que muchas empresas hayan tenido que parar su actividad y, por tanto, tomar duras decisiones en lo que respecta a sus trabajadores.
El desempleo afecta con especial incidencia en la provincia de León al sector servicios, que registra 1049 parados más, principalmente pertenecientes al sector hostelero y turístico que se ha visto obligado a cesar su actividad como consecuencia de esta crisis. El sector de la construcción ha sido otro de los grandes afectados, destruyendo 357 empleos más. En cuanto a la seguridad social, León perdió 1.183 afiliados en el mes de marzo, llegando a los 156.025 totales.
Fele considera que los empresarios leoneses han hecho durante los últimos años un gran esfuerzo por consolidar su actividad, crear empleo y aumentar su productividad. Sin embargo, las medidas en el ámbito laboral y económico aprobadas por el Gobierno no han tenido en cuenta ese esfuerzo ni la situación de las miles de empresas y autónomos y, además, van a impedir sentar las bases de la necesaria recuperación económica de España.
La voluntad de los empresarios por encima de todo, en estos momentos de crisis por el COVID-19, es sostener la economía y el empleo, siempre priorizando, como no podía ser de otra manera, la seguridad y la salud de los ciudadanos. Por ello, es ahora más necesario que nunca trabajar unidos y en el marco del diálogo social para evitar que la economía entre en una profunda recesión y que sean atendidas todas las demandas del tejido empresarial, que es el que sostiene la economía.
