La Asociación de Talleres de Reparación de la provincia, integrada en la Federación Leonesa de Empresarios, denuncia el aumento de negocios clandestinos que asciende a 200 y da empleo a unas 300 personas como afirman desde la asociación en un reportaje publicado en el Diario de León. Ramón Marinelli, portavoz de la asociación, destaca que las reparaciones que se realizan en estos talleres ilegales no cumplen con las medidas de seguridad y son un riesgo para la seguridad vial.
Marinelli añade que la Administración debería actuar de oficio contra estos negocios ilegales y asegura que es fácil seguir la pista a estos mecánicos que no están dados de alta en el IAE, pero que en todas las tiendas de recambios y en los centros de descontaminación tienen perfectamente identificados.
Los empresarios del sector también reclaman dar facilidades para que se puedan denunciar estos casos y es que los talleres ilegales han ido aflorando porque su cautela se ha ido relajando y cada vez actúan con menos precaución.
Al riesgo para la seguridad que suponen las reparaciones en talleres ilegales se suma las condiciones en precario con la que trabajan los empleados de estos negocios.
El trabajo en los talleres, según afirma el portavoz de la asociación, empezó a bajar con la llegada de la crisis económica y asegura que los talleres ilegales existieron siempre aunque comenzaron a repuntar con la crisis.
Escasez de personal cualificado
En cuanto a la formación de profesionales, Marinelli señala que la FP no cubre las demandas del sector y no se encuentran trabajadores cualificados.
Existe dificultad para encontrar electromecánicos con experiencia, pero también chapistas y pintores. Las nuevas características de los vehículos, con más componentes eléctricos, es lo que condiciona esta demanda de personal cualificado. Asegura Marinelli que la Formación Profesional ha mejorado pero no es suficiente.
